TEXTO: Juan Piñera FOTOS; BUBY
Tuvimos la posibilidad de disfrutar, la mañana del sábado 5, de un espectáculo que entra por los ojos, los oídos y todos los sentidos, para nuestro beneplácito y regocijo.
Nos estamos refiriendo a Canción para estar Contigo, para voz, figuras e imágenes con textos de Norge Espinosa, sobre una idea original de Bárbara Llanes y según concepto y visualidad de Rubén Darío Salazar y Zenén Calero.
En realidad, fue un sueño que la soprano pudo hacer tangible, gracias a un equipo de trabajo que es todo un lujo para la escena en Cuba constituído por los integrantes de los matanceros Teatro de las Estaciones y Danza Espiral.
Pero, antes de cualquiera otra consideración posible, debemos afirmar que Bárbara Llanes es una compositora de pura estirpe, esa que parte de la sencillez, llega al hecho artístico y nos hace mejores después del disfrute de su obra.
Sin olvidar el virtuosismo de todos los que participan en Canción para estar Contigo, quisiéramos detenernos particularmente en la música de este última puesta en escena de Teatro de las Estaciones.
Bárbara Llanes, como creadora, musicalizó poemas de mujeres y hombres de Latinoamérica, los hizo suyos y a la vez, de quien tiene el privilegio de escucharlos.
Algunas de las canciones escuchadas en el espectáculo, tienen vida propia, por tanto, trascenderlo más allá del mismo y del fin inicial para el que fueron concebidas.
Por otra parte, su música tiene otra virtud la de estar firme y orgánicamente enraizada en nuestras tradiciones con una visión contemporánea.
Y hablando de raíces, Bárbara Llanes con un reducido conjunto de cámara conformado por clarinete, fagot, piano y cuarteto de cuerdas, no olvida una fundamental razón de ser: la cubanía en función de la comunicación con el público.
Quizás por ello, la dirección musical del ensemble, a cargo de José Antonio Méndez Padrón, haya sido tan armónicamente lograda, o que las coreografías, de Liliam Padrón, articulen tan bien al texto espectacular en franca conjunción con la partitura musical.
Asimismo, no es gratuito, que el realizador Marcel Beltrán, haya aprovechado las virtudes de la música, concibiendo una suerte de hermoso video clip, a partir de la canción principal del espectáculo, sobre versos de Norge Espinosa.
Canción para estar Contigo, con y de Bárbara Llanes, contribuye, con su belleza y logros, a ser digna heredera de la zaga musical que Teatro de las Estaciones nos viene regalando desde hace años con autores como Wolfgang Amadeus Mozart, Claude Debussy, Maurice Ravel, Sergei Prokofiev y la matancera Elvira Santiago.
Y para concluir estas líneas, todo este trabajo, el de mayor antigüedad, como el más reciente, hacen justicia y definen el pensamiento de José Martí que aparece en las notas al programa de Canción para estar Contigo, de Teatro de las Estaciones: “Mejora oír cantos dulces”.